La plataforma de arte digital de ABC Cultural, BYN, se adentra en un viaje a través del tiempo y la moda con su último ‘drop’: una colección de portadas icónicas protagonizadas por el sombrero
Funcionales y estéticos, los sombreros han dejado una marca indeleble en la Historia del Arte y laCultura. El nuevo drop de BYN, la comunidad WEB3 de ABC Cultural, incluye obras maestras como ‘En la hora del thé’, de 1917, y ‘Turf’, de 1928, reflejando la elegancia y modernidad de sus épocas. La colección de NFT conecta con el mundo digital actual a través de la comunidad Degen y el arte cripto.
Los hay y los ha habido de todo tipo: funcionales y pura estética, distinguidos, castrenses, bufonescos, teatrales, folclóricos, imperecederos, evitables, taurinos, legendarios, excesivos, artesanales, publicitarios, en serie. Los sombreros, y todo aquello que cae a la sombra de su definición, nos han acompañado desde que algún congénere consideró que debía proteger su cabeza de las inclemencias del tiempo con algún elemento a mano, y que, ¡vaya!, tampoco le quedaba nada mal esa cobertura craneal.
El resto es Historia. Las pinacotecas son abundantes en sombreros pintados: de paja, pileos, pestasos, gorros frigios, canotiers, bombines, de copa. El cine y la televisión se han encargado de popularizar los sucesivos intentos de renacer de este complemento del que inexplicablemente nos hemos distanciado, que han incluido desde el borsalino canallita al negro de ala ancha de reminiscencias ‘amish’ que tanto se ha lucido en DJ sets.
Este drop de BYN en su colección ‘Originales’ pone a la venta en concreto dos portadas en las que el sombrero es protagonista: ‘En la hora del thé’, para el número 1.358 del año 1917, obra de Roberto Carter Carreras (que pudo publicar gracias al Concurso de Portadas de la revista), en la que vemos a una pareja de la alta sociedad de comienzos del siglo XX: toman el té, ella aprovecha para leer la prensa, indicativo de su nivel social, de su categoría de mujer que ha recibido educación; él está fumando un cigarro mientras la acompaña. Ambos van tocados con sendos sombreros: él porta una chistera, un sombrero de copa símbolo de la elegancia masculina —cuya invención se remonta a 1797—. Ella viste un peculiar sombrero de líneas geométricas que habla de modernidad, de futuro.
Un tema recurrente
Por su parte, ‘Turf’ es obra del pintor, ilustrador y cartelista Francisco de Cidón (nombre unido a los orígenes de la publicidad en España) para el número 1.958 de ‘Blanco y Negro’, editado en 1928. En esta imagen observamos a un grupo de cuatro personas, aunque, de manera poco común, solo una de ellas, una mujer, está de frente al espectador. Los hombres están de espaldas o de lado, parcialmente ocultos.
Por su vestimenta y las gorras de dos de ellos, el espectador puede deducir que se trata de una escena en una carrera de caballos, un tema recurrente en las ilustraciones de los años 20, junto con escenas de golf y esquí. La mujer lleva un vestido corto cubierto con una piel y un sombrero cloche característico de la moda de aquellos locos años 20 con copa hemisférica, cuerpo cilíndrico y un ala muy pequeña. El caballero que la acompaña lleva una elegante chistera, típica de la alta sociedad.
Ambas piezas, que se suman a la portada fundacional de Blanco y Negro obra de Ángel Díaz Huertas que se puso a la venta para celebrar el 133º aniversario de la revista, pueden adquirirse en Zora, en la colección Originales de BYN. Los originales de estas obras, además, podrán ser disfrutados en una visita guiada exclusiva para coleccionistas al Museo ABC de Dibujo e Ilustración, a cuyas exposiciones se puede acceder de forma gratuita.