La organización internacional de derecho ambiental ClientEarth prepara acciones legales contra los directores de Shell por la falta de compromiso climático que muestran al frente de la compañía
ClientEarth ha iniciado una acción legal contra la Junta Directiva de Shell por no estar preparando adecuadamente a la compañía para la transición energética. Es el primer caso que busca responsabilizar personalmente a los directores de una gran compañía energética por no emprender medidas de adaptación para hacer frente al cambio climático y por poner de ese modo en riesgo los activos de la empresa.
Esta organización especializada en derecho ambiental para defender la vida en la Tierra, argumenta que el hecho de que la Junta Directiva no esté implementando una estrategia climática alineada con el Acuerdo de París es un incumplimiento de las obligaciones que establece la Ley de Sociedades del Reino Unido. En virtud de esa Ley, el equipo directivo de la petrolera está legalmente obligado a actuar, de manera que “promueva el éxito de la empresa con el cuidado, la habilidad y la diligencia razonables”.
Algo que según Paul Benson, abogado de ClientEarth, no se estaría llevando a cabo. “Shell está seriamente expuesta -afirma el letrado- a los mayores riesgos del cambio climático, sin embargo, su plan de adaptación y mitigación es del todo defectuoso, por lo que estaría engañando a los inversores y al mercado en general”.
El prestigioso equipo jurídico de esta organización dice actuar en defensa de los intereses de Shell al aceptar los litigios de sus accionistas contra la actual dirección, con el propósito de “garantizar que las ganancias a corto plazo no se obtengan a expensas de la viabilidad comercial de la empresa”.
“El mundo de los negocios está plagado de ejemplos de empresas que no supieron adaptarse. Shell se arriesga a seguir el camino de compañías como Kodak o Blockbuster. A menos que la Junta cambie de rumbo, su valor a largo plazo se irá erosionando hasta llegar a desaparecer”, agregó Benson.