En el Comité Directivo Nacional, del Partido Revolucionario Institucional, andan muy sensibles. Las derrotas en serie que les ha propinado el presidente López Obrador y su posición marginal en el mapa político actual del poder, sin gobernaturas propias, no compartidas, parecen agobiar a la dirigencia. El escenario actual, para ellos, rumbo al 2024 no es muy claro. Casi seguramente, no llevarán candidato tricolor a la presidencia, por el Frente Amplio Opositor. Sus gallos no prendieron, y entraron con calzador, a la segunda ronda. Simplemente carecen de arrastre popular.
En el proceso interno del Frente, los tricolores, en los estados, han recurrido a sus viejas mañas acarreando votantes, firmantes en este caso, con credenciales de elector cuestionables. Todo ello quedó registrado, y muestra la debilidad del otrora partido dominante. Es evidente, que ya no son competitivos en solitario; y, si juegan fuera de la alianza, serían marginales como el Movimiento Ciudadano. Tal vez, serían catalogados como esquiroles. El desprestigio de 90 años en el poder, y sus excesos, los han marcado.
De esta forma, las críticas del empresario, Claudio X González, respecto a la camada de gobernadores y priistas, que acompañaron al peñanietismo, que están señalados, y algunos encarcelados, por corrupción, molestaron mucho en la cúpula del PRI. Incluso, se indignaron porque los compararon con los funcionarios y gobernadores morenistas, de la actualidad. Además, manifestaron que se podría llegar a la ruptura de la alianza. Finalmente, el empresario metió reversa y expuso que la unidad del bloque es prioridad. “Morena es la peor versión del PRI”, había opinado.
Colosio deshoja la margarita, aún
Luis Donaldo Colosio Riojas, alcalde de Monterrey se metió a la burbuja de la contienda presidencial, para anunciar que pronto definirá si participa como candidato, y con cuál partido. Colosio, ha manifestado que Movimiento Ciudadano debería sumarse a la potencial candidatura del Frente Amplio Opositor, y no participar en solitario. Incluso que se debería a apoyar a Xóchitl Gálvez si es la abanderada contra Morena. Será interesante conocer su postura.
Las encuestas del dirigente nacional del MC, Mario Delgado, establecen que para ellos no es conveniente sumarse al Frente Opositor si también anda el tricolor como integrante. Delgado, afirma que el PRI está muy desprestigiado, y que eso perjudicaría a una alianza amplia. Cabe mencionar que la casa encuestadora del partido Naranja no aparece entre las más prestigiadas ni en las que tienen mejores metodologías, ni siquiera tienen direcciones digitales, ni presenciales, actualizadas o disponibles.
Las encuestas servirán de coartadas para los dedazos en candidaturas
La política mexicana, regularmente, es una carrera contra la realidad. El discurso del político, frecuentemente, termina en mentiras evidentes, cuando los hechos se imponen. En tanto, mediante las encuestas, se presume su popularidad, su aprobación; y, el cariño y admiración de sus gobernados. De esta forma, las encuestas, de todos colores y sabores, se convierten en las herramientas para tratar de evadir a la realidad, a los fracasos y las mentiras.
En México las encuestadoras, regularmente, entran en torbellinos de falta de credibilidad. Lo que les acarrea desprestigio a los instrumentos de opinión y a las propias empresas. Se equivocan con frecuencia, aunque no siempre es culpa de sus metodologías, en el caso de las empresas serias. Adicionalmente, surgieron membretes “patito”, que engañan a la opinión pública, a los opinadores, y, además, sirven como paleros de los políticos y sus partidos.
Es evidente, que los electores, desde hace generaciones, se volvieron expertos en eludir y/o mentir ante los encuestadores, aunque sean encuestas de salida, se niegan a contestar con la verdad el sentido de su voto. Ni siquiera ante el INEGI y los censos de población parecemos capaces de responder con sinceridad.
De esta forma, ya sea en vivienda en donde el rechazo a ser encuestado es de 60 por ciento y por teléfono en donde las negativas superan el 90, las muestras se van distorsionando y los tiempos de aplicación alargándose. Lo que dará como resultado, cifras que no concuerdan con la realidad y que al momento de contar los votos son evidenciadas.
Sin embargo, mediante las encuestas se elegirán a los candidatos presidenciales en todos los frentes. Morena incluye este mecanismo en sus estatutos, aunque nadie queda conforme ni con los resultados ni con los procedimientos. Incluso ni siquiera creen que se aplican. Es claro, que el dedo presidencial elige a sus candidatos, y lo demás, es para ir aplacando a los molestos y desilusionados aspirantes derrotados.
Ahora el frente que integran el PRI, PAN, PRD y con organizaciones ciudadanas, incluyó las encuestas en sus procesos. De esta forma, el cuestionado estudio de opinión se convertirá en el mecanismo principal para descartar a los calefactos, y justificar la selección del candidato. Por su parte, los partidos buscarán imponer a uno de los suyos. El tricolor va con De la Madrid y Paredes; el PAN, con Santiago Creel, mientras, los organismos ciudadanos impulsan a Xóchitl.
Entonces vemos al PRI acarreando credenciales para contabilizar votos digitales cuestionables; al PAN buscando a sus grupúsculos estatales, para que voten por Creel. La única que va conquistando votos espontáneos es Xóchitl Gálvez. Ella se perfila como favorita, pero a las directivas partidistas no les agrada, por su independencia.
Así con los dados cargados, y las encuestas como coartadas, todos los bandos se preparan para competir para la presidencia el 2024. En menos de dos meses, conoceremos la identidad de los candidatos, de las principales fuerzas políticas. Las cosas están interesantes. Veremos