En las escuelas rusas se defiende la invasión de Ucrania. Los estudiantes o profesores que no están de acuerdo con la ideología patriótica del gobierno ruso se ven sometidos a una gran presión.
Desde hace dos meses, las clases en las escuelas rusas comienzan con «charlas sobres cosas importantes», y desde el 1º de septiembre es obligatorio izar la bandera rusa. El Ministerio de Educación determina los temas de las charlas: fiestas oficiales, como el Día de la Madre, del Padre o de los Ancianos. En el Día del Maestro, por ejemplo, se ordenó explicar a los escolares que las tropas rusas ocuparon el territorio ucraniano por «justicia histórica», porque eran «territorios originalmente rusos».
A los escolares a menudo se les habla de Ucrania. Mark (nombre ficticio) va a la escuela en San Petersburgo, y cuenta que el director y el maestro dijeron que Ucrania llevaba a cabo ataque terroristas. «En realidad, durante la lección, debemos aprender cómo comportarnos en caso de un acto terrorista», dice Mark. Y un estudiante de secundaria de Kaliningrado dice que, a fines de octubre, el director de su escuela explicó durante la lección de patriotismo que «Rusia está siendo atacada constantemente por alguien, y todos quieren destruir el país».
Interrogados después de faltar a clase
Los padres que quieren proteger a sus hijos de este tipo de enseñanzas pueden tener serios problemas. La familia de Varya Scholiker, de diez años, recibió un informe de la Oficina de Bienestar Juvenil en el que obligaban a la niña a un asesoramiento psicológico obligatorio, porque no asistió a «charlas sobre cosas importantes» en una escuela de Moscú.
Según Jelena Scholiker, un comité en la escuela debatió sobre el comportamiento de su hija. Un representante de la dirección de la escuela, un psicólogo y un hombre que puede haber sido del servicio de inteligencia ruso (FSB) le dijeron que les preocupaba que Varya no participara en las «charlas sobre cosas importantes».