El presidente ruso, Vladimir Putin, anunció en un importante discurso el viernes que Rusia anexaría cuatro regiones de Ucrania, una escalada dramática que no deja un camino claro hacia la paz.
El panorama general: Rusia ocupa parcialmente los cuatro oblasts de Ucrania (Donetsk, Luhansk, Kherson y Zaporizhzhia) y realizó referéndums en los últimos días que la mayoría de los gobiernos occidentales calificaron de «farsa».
Lo que dice: Putin afirmó que los resultados de los referéndums habían sido «inequívocos».
Putin dijo que Ucrania y «sus verdaderos amos en Occidente» deben saber que «los ciudadanos de Luhansk, Donetsk, Zaporozhia y Kherson se han convertido en nuestros ciudadanos para siempre».
Putin llamó a Ucrania a negociar, pero dijo que las anexiones eran definitivas. «No hay vuelta atrás, Rusia no los defraudará». Y agregó: «Defenderemos nuestro territorio con todos los medios a nuestro alcance».
Putin afirmó que los territorios habían sido históricamente parte de Rusia, antes de centrar su atención en el «Occidente colectivo» que, según afirmó, «simplemente no puede aceptar la existencia de Rusia, con su enorme territorio, sus enormes recursos».
Situación: las fuerzas rusas han estado a la defensiva mientras las fuerzas ucranianas realizan contraofensivas en el este y Kherson en el sur. Mientras Putin hablaba, las fuerzas ucranianas estaban en proceso de rodear las posiciones de Rusia en la ciudad de Lyman en el norte de Donetsk.
Con sus anexiones, que los gobiernos occidentales han rechazado universalmente, Putin afirmará que se están combatiendo en suelo ruso, en un aparente intento de reformular esto como una guerra defensiva.
Crucialmente, el Kremlin ya ha sugerido que los territorios ahora estarán bajo el paraguas nuclear de Rusia y, por lo tanto, los ataques allí podrían recibir una respuesta nuclear. Funcionarios ucranianos y occidentales han dicho que no se dejarán disuadir por el «chantaje nuclear».
El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, continúa definiendo la victoria como la eliminación de las fuerzas rusas de todos los territorios de Ucrania, y advirtió previamente que la anexión del territorio ucraniano haría imposibles las negociaciones de paz.
Rusia también está en proceso de reclutar a unos 300.000 hombres en un intento por estabilizar la precaria posición militar.
Putin reconoció los errores» en el proceso de movilización el jueves y dijo que cualquiera que haya sido convocado a pesar de no cumplir con los criterios del borrador «debe ser enviado a casa».
El 70% de los rusos dice sentir miedo o alarma como resultado de la movilización parcial de Putin, y el 66% cree que la movilización total es posible, según la encuestadora independiente Centro Levada .
Las proporciones de rusos que creen que la guerra no va bien (31%) y desean conversaciones de paz (48%) también aumentaron en la nueva encuesta.