El presidente Andrés Manuel López Obrador firmó la iniciativa de Ley de Husos Horarios en los Estados Unidos Mexicanos que este día enviará al Congreso de la Unión para que se discuta y, en su caso, se apruebe la eliminación del horario de verano.
Esta propuesta del Ejecutivo surge a partir de tres razones principales que explicaron en la conferencia de prensa matutina la secretaria de Energía (Sener), Rocío Nahle García y el secretario de Salud, Jorge Alcocer Varela. El cambio de horario tiene efectos nocivos en la salud de las personas, que en su mayoría lo rechazan y no contribuye al ahorro de energía.
En el Salón de la Tesorería de Palacio Nacional, la titular de la Sener expuso que, de acuerdo con los resultados de la encuesta realizada en junio por la Secretaría de Gobernación, el 71 por ciento de la población no está a favor del horario de verano y solo el 29 por ciento lo aprueba.
“Hay una inconformidad permanente en la sociedad desde 1996 cuando se instaló este horario; hay más de 40 iniciativas de ley presentadas desde 2001 en contra del horario de verano por diferentes fracciones parlamentarias”, acotó.
La evidencia científica, agregó, demuestra que no se presentan cambios importantes en la luz solar en los países cercanos a los Trópicos, por lo que no está justificada su implementación desde 1996.
El ahorro de energía es muy bajo, menor al uno por ciento anual del consumo nacional, debido a la constante innovación tecnológica en enseres domésticos, así como el cambio de luminarias convencionales por ahorradoras de energía, de modo que no impacta favorablemente en el gasto familiar, apuntó la secretaria.