El presidente Andrés Manuel López Obrador encabezó la ceremonia del 213 Aniversario del Grito de Independencia desde el balcón principal de Palacio Nacional, donde destacó a los hermanos migrantes y el amor en la tradicional arenga.
Acompañado de la doctora Beatriz Gutiérrez Müller, el mandatario exclamó ante miles de personas reunidas en el Zócalo de la Ciudad de México:
¡Viva la Independencia!
¡Viva Miguel Hidalgo y Costilla!
¡Viva Josefa Ortiz de Domínguez!
¡Viva Ignacio Allende!
¡Viva Leona Vicario!
¡Viva José María Morelos y Pavón!
¡Viva Vicente Guerrero!
¡Vivan los héroes anónimos!
¡Viva la libertad!
¡Viva la igualdad!
¡Viva la justicia!
¡Viva la democracia!
¡Viva nuestra soberanía!
¡Viva la fraternidad universal!
¡Mexicanas! ¡Mexicanos!
¡Que muera la corrupción!
¡Que muera la avaricia!
¡Que muera el racismo!
¡Que muera la discriminación!
¡Que viva el amor!
¡Que vivan nuestros hermanos migrantes!
¡Vivan los pueblos indígenas!
¡Viva la grandeza cultural de México!
¡Viva México!
¡Viva México!
¡Viva México!
El jefe del Ejecutivo ondeó el lábaro patrio que recibió de la escolta de cadetes del Heroico Colegio Militar en el Salón de Embajadores. Posteriormente, acompañado de integrantes de su Gabinete, apreció desde el balcón la pirotecnia que iluminó el primer cuadro de la capital.
La mañana de este viernes, en la inauguración de la primera etapa del Tren El Insurgente, el presidente López Obrador refirió que Miguel Hidalgo y Costilla dio la vida por la Independencia de México y la justicia al proclamar la abolición de la esclavitud.
Recordó que en la batalla del Monte de las Cruces, del 30 de octubre de 1810, el cura Hidalgo, en un acto de humanismo, decidió proteger la vida de miles de integrantes del ejército Insurgente conformado por el pueblo y de realistas, pertenecientes a las fuerzas virreinales. Hasta 1824 fue reconocido como el Padre de la Patria tras el triunfo del movimiento independentista.