La suspensión definitiva de las corridas que dictó un juez en junio sigue en vigor hasta que se resuelva en tribunales
La plaza de toros de México no celebrará su temporada grande, ni ningún otro festejo, puesto que sigue en vigor la suspensión definitiva de actividades taurinas que dictó un juez el pasado junio. El coso, el más amplio del mundo, ha emitido un comunicado en el que informa de que “seguirá combatiendo las resoluciones que han restringido la celebración de los festejos taurinos y no descansará hasta lograr un resultado favorable para la tauromaquia”. Los derechos de apartado que cada temporada contratan los aficionados para reservar sus puestos en la plaza tampoco se renovarán, por tanto, siguen en vigor los emitidos para el periodo 2019/2020. Los seguidores de las corridas están viajando a otros lugares del país donde no hay prohibición judicial.
El cese definitivo de actividades en el coso mexicano se produjo el 10 de junio tras un amparo promovido por la asociación Justicia Justa, que argumentó que el trato “degradante” que sufre el animal en las corridas choca frontalmente con el derecho a un medio ambiente sano, una agarradera legal que permitió al juez federal Jonathan Bass prohibir los festejos, algo, dijo, que “lejos de constituir una afectación a la sociedad, generaría un beneficio no solo a las partes del presente juicio sino a todas las personas que vivan en la Ciudad de México y su entorno adyacente con independencia de la postura ideológica que profesen acerca de las actividades taurinas”.