‘Pinocho de Guillermo del Toro’ vio finalmente la luz hace unos meses, tras prácticamente 15 años de desarrollo. El esfuerzo ha tenido su recompensa con el Oscar a mejor película de animación
En una de las categorías que todas las quinielas apuntan a un posible ganador. No hay duda de que Pinocho de Guillermo del Toro partía como principal favorita para llevarse el Oscar a mejor película de animación, después de haber sido ya premiada con el Globo de Oro y el BAFTA, entre otros premios. Así se ha confirmado con el primer Oscar repartido esta noche.
El camino ha sido muy largo para que esta película se convirtiese en realidad, y antes de recoger estos frutos ha tenido que pasar por un proceso muy complicado, hasta el punto de que muchos pensaron que nunca llegaría a ver la luz. De hecho, llevaba prácticamente 15 largos años en desarrollo, ya que fue anunciada en 2008, aunque tuvo fases en las que parecía encontrarse en punto muerto y no lograba avanzar.
Y no solo eso, sino que en la cabeza del propio Guillermo del Toro, el proyecto lleva gestándose aún mucho más tiempo. La historia de Pinocho siempre ha tenido un significado muy especial para él, y asegura haber querido hacer esta película desde que tiene uso de razón. Todo empezó cuando vio de niño la versión de Disney, original de 1940, e inmediatamente sintió una fascinación por esta historia que desde entonces llevaría siempre consigo. De hecho, el cineasta afirma que Pinocho es el personaje de ficción por el que ha sentido una conexión personal más profunda en toda su vida.
La financiación de ‘Pinocho’ para el ‘stop motion’
Uno de los mayores desafíos fue conseguir el presupuesto necesario para llevar a cabo el proyecto. La película utiliza la técnica stop motion, que es más costosa que la animación tradicional, ya que utiliza objetos estáticos para transmitir que cobran vida fotograma por fotograma. Durante un tiempo no consiguieron convencer a ningún estudio de que financiase este proyecto tan ambicioso, por lo que el desarrollo quedó parado hasta que finalmente Netflix se hizo cargo.
¿Por qué Guillermo del Toro llevó un moño azul a los Oscar?
Al igual que en la ceremonia del año pasado de los Oscar, en esta edición Guillermo del Toro portó un moño azul en solidaridad con las personas refugiadas como consecuencia de la guerra entre Rusia y Ucrania.
En la cinta azul se puede leer “#withrefugees (”con los refugiados”). Se trata de una campaña creada por el alto comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (UHCR), tiene por objetivo apoyar a las persona han sido desplazadas por el conflicto bélico.