La cuestión migratoria no es la única crisis abierta que tienen Londres y París en estos momentos tras la consumación del Brexit. Las condiciones de acceso de pesqueros franceses a las aguas británicas, donde faenaban antes del Brexit, es otro de los focos de tensión, llevando a Francia a amenazar a Reino Unido con medidas de represalia si las autoridades británicas no conceden más licencias a sus barcos.
Para hacer más presión, los pescadores franceses han lanzado este viernes una primera ofensiva para bloquear el acceso a barcos ingleses en el puerto de Saint-Malo y prevén también próximamente limitar el acceso de mercancías al túnel bajo el canal de la Mancha. Otros barcos también tenían previsto bloquear durante la jornada el acceso de ferrys procedentes de Reino Unido en otros puertos franceses como el de Ouistreham, cercano a las playas del desembarco de Normandía.
Pero Reino Unido y Francia difieren sobre el tipo y alcance de los justificantes. En total, desde el 1 de enero de 2021, Francia obtuvo “más de 960 licencias” de pesca en las aguas de Reino Unido y de las islas británicas situadas frente a las costas francesas de Normandía, pero París reclama aún más de 150 autorizaciones, según el ministerio del Mar galo.