Con su muerte, ocurrida este domingo a los 81 años y que fue informada por su familia a través de su cuenta oficial en Instagram, termina la época de los grandes intérpretes de la música regional mexicana, un período que inició con Tito Guízar en los años 30, Pedro Infante en la década posterior y siguió con Jorge Negrete, Javier Solís y José Alfredo Jiménez.
Fernández era el heredero de esta saga, y unas de las voces más reconocidas de Hispanoamérica.El cantante se encontraba hospitalizado desde la semana anterior, después de una recaída del accidente que tuvo en su habitación el pasado mes de agosto.