Las autoridades mexicanas interceptaron a 5,234 migrantes en diversos operativos de seguridad, como parte de una estrategia para frenar los flujos migratorios hacia Estados Unidos. Esta acción ocurre en medio de la presión del presidente electo estadounidense, Donald Trump, quien ha advertido sobre posibles aranceles del 25% a productos mexicanos y canadienses si no se contienen las llegadas irregulares de migrantes y el tráfico de drogas, particularmente fentanilo.
La Secretaría de Marina (Semar) señaló que, entre el 1 de octubre y el 3 de diciembre de 2024, se han rescatado 349,625 migrantes en México. Sin embargo, las autoridades no han precisado las regiones de los operativos, las nacionalidades de los migrantes ni su destino posterior. La estrategia ha sido cuestionada por organismos internacionales, como la ONU, debido a posibles violaciones a los derechos humanos por el uso de fuerzas militares en labores migratorias.
En paralelo, se anunció el mayor decomiso de fentanilo en la historia de México: 1,100 kilogramos incautados en Sinaloa, equivalentes a 20 millones de dosis con un valor de 400 millones de dólares. La presidenta Claudia Sheinbaum aseguró que su gobierno está cumpliendo con los compromisos expresados en una conversación reciente con Trump, en la que abordaron acciones para combatir el tráfico de opioides sintéticos.
Israel Ibarra, experto del Colegio de la Frontera Norte, señaló que estas medidas buscan evitar que la población migrante llegue a la frontera con Estados Unidos, en un esfuerzo por mejorar la relación bilateral. No obstante, los impactos en los mercados y el peso mexicano continúan siendo motivo de preocupación tras las declaraciones del mandatario republicano.