Sus socios serán un lastre si decide gobernar con ellos, la realidad es que no los necesita.
El PRI ha consolidado este domingo su poder en uno de los últimos bastiones que le quedan en México. Manolo Jiménez Salinas ha ganado las elecciones a la gubernatura de Coahuila; y la victoria aplastante que ha conseguido llevará al Estado a cumplir un siglo en manos del partido tricolor. El candidato de la alianza del PRI, PAN y PRD ha vencido con el 56,5% de los votos al candidato de Morena, Armando Guadiana, que ha sacado el 21,4%; al del PT, Ricardo Mejía, que ha quedado tercero con el 13,5% de los votos.
A todos sorprendió la diferencia, aún con la ruptura de Mejía esperaba más votos opositores.
Así, Manolo tendrá que cargar con el lastre del PAN, que no aporto ni siquiera 90 mil votos, contra los 164 mil del 2021.
No los necesitaban, pero por alguna razón ahí están y ahora Manolo tendrá o no tendrá, que tomarlos en cuenta… «eran muchos y parió la abuela», acercando a un puñado de desorientados.
Otra cosa interesante y que no se veía desde hace mucho años es que, en esta ocasión los panistas se unieron y estuvieron de acuerdo, esto también gracias a la figura y liderazgo de Manolo.