Los citizens buscarán ganar por primera vez la máxima competición continental ante un rival italiano que sobre el papel parte como víctima.
Haaland, Gündogan, De Bryune, Rodri, Bernardo Silva, Grealish, Pep Guardiola… Sólo con decir estos nombres parece que resulta obvio decir que el Manchester City es favorito en cualquier partido y a ganar cualquier título, así que no iba a ser menos en la final de la Champions League.
El conjunto inglés parte como el principal aspirante a conseguir por primera vez en su historia una Champions League en la final que disputa este sábado (21:00 horas, Estadio Olímpico de Atatürk) ante el Inter de Milán. Todo lo que no sea un triunfo citizen supondría una decepción mayúscula para la entidad y una gran sorpresa a ojos del resto del mundo.
El Inter de Milán parte con el claro papel de víctima, pero eso no es algo que asuste ni mucho menos a los italianos. Se ha colado en la final de la Champions League contra todo pronóstico porque los de Simone Inzaghi no aparecían en ninguna quiniela al inicio de la temporada, pero han ido dejando rivales por el camino y desde luego que una vez llegados a este punto pondrán toda la carne en el asador.