El Parlamento sueco eligió este lunes primera ministra a la socialdemócrata Magdalena Andersson, cinco días después de que también fuera votada y dimitiera unas horas más tarde por la salida del Gobierno de los verdes, sus socios de coalición.
Andersson, primera mujer en gobernar Suecia, recibió 101 votos a favor, por 173 en contra y 75 abstenciones, con lo que se cumple la condición establecida en el sistema sueco para ser elegida primera ministra: no tener en contra la mayoría de la Cámara, fijada en 175 escaños.
La primera ministra sueca presentará mañana martes su nuevo gobierno y se reunirá posteriormente con el rey Carlos XVI Gustavo en el Consejo de Estado.
La raíz del caos político se remonta al 2010, cuando entró en el Parlamento Demócratas de Suecia (SD), fuerza nacida la década anterior a partir de un grupo abiertamente nazi y que se ha ido moderando sin abandonar su tinte xenófobo hasta convertirse en la tercera en porcentaje de votos.