Deshielo de glaciares de montaña, contaminación atmosférica o calor insoportable. La Tierra afronta hasta seis puntos de no retorno ambientales que podrían tener un «impacto irreversible» para nuestro planeta.
La Tierra afronta seis puntos de no retorno ambientales que podrían acarrear «impactos irreversibles para las personas y el planeta» si no se abordan sus riesgos: extinciones aceleradas, agotamiento del agua subterránea, deshielo de glaciares de montaña, contaminación atmosférica, calor insoportable y futuro inseguro.
Así se recoge en el ‘Informe de riesgos de desastres interconectados‘, elaborado por el Instituto de Medio Ambiente y Seguridad Humana de la Universidad de las Naciones Unidas (UNU-EHS, por sus siglas en inglés), y dado a conocer este miércoles, cuando queda poco más de un mes para que comience la Cumbre del Clima, conocida como COP28- en Dubái (Emiratos Árabes Unidos).
Algunos sistemas socioecológicos están estrechamente relacionados con las personas, como los hídricos, los alimentarios y los ecosistemas. Cuando se deterioran, no suele ser un proceso sencillo y predecible. Más bien, la inestabilidad aumenta lentamente hasta que, de repente, se alcanza un punto de no retorno y el sistema cambia fundamentalmente o incluso se colapsa, con impactos potencialmente catastróficos.
El informe define punto de no retorno como el momento en el que un sistema socioecológico ya no es capaz de amortiguar los riesgos y proporcionar sus funciones previstas, tras lo cual el riesgo de impactos catastróficos para estos sistemas aumenta sustancialmente. Esos puntos de inflexión van más allá de los ámbitos individuales del clima, los ecosistemas, la sociedad o la tecnología.
Por el contrario, están intrínsecamente interconectados y estrechamente vinculados a las actividades humanas y a los medios de subsistencia. Muchos riesgos nuevos surgen cuando los mundos físico y natural se interconectan con la sociedad humana.