Más de un millón de palestinos desplazados, que se hacinan en la ciudad del sur de la Franja de Gaza, temen por sus vidas ante una inminente operación israelí en Rafah.
Agotados tras meses en tránsito, los palestinos de Rafah se enfrentan de nuevo a dilemas imposibles. Cada vez más personas se hacinan en la ciudad más meridional de la Franja de Gaza, que a su vez limita con la frontera fuertemente fortificada con Egipto, y se preguntan adónde pueden ante la amenaza de una ofensiva terrestre israelí en la ciudad
«Tememos por nuestras vidas», dijo a DW Iman Abu Musa, de 22 años, en un mensaje de WhatsApp. Escapó recientemente a Rafah desde la vecina Jan Yunis, donde los intensos combates terrestres entre las tropas israelíes y los militantes de Hamás han hecho huir a miles de personas hacia el sur y el oeste en busca de seguridad. Abu Musa dijo que lo único que puede hacer ahora era rezar por «la protección de Dios».
«Realmente esperamos que la agresión se detenga antes de que el ejército entre en Rafah y antes de que la situación se deteriore aún más», escribió Abu Musa.