En poco más de 90 kilómetros, entre las ciudades italianas de Bolonia y Parma, se concentran los museos y las fábricas de algunos de los mejores coches del mundo. Constructores de leyenda como Ferrari, Lamborghini, Maserati, Pagani… e incluso Ducati, la mítica marca de motos, son iconos del diseño italiano y las referencias para seguir una ruta que se conoce como el Motor Valley. Y los motores pueden detenerse perfectamente para hacer un alto y disfrutar de la buena mesa. Porque este es un viaje que atraviesa Emilia Romagna, la región gastronómica italiana por excelencia, con paradas imprescindibles en Bolonia, Parma o Módena.