Pocas calorías y mucha agua
Con su sabor ligeramente amargo, 100 g de porción comestible proporcionan 25 calorías, 1,5 g de proteínas, 1,3 g de carbohidratos, 0,24 g de lípidos totales y 0,04 g de ácidos grasos saturados. Además, contiene 0,02 g de ácidos grasos monoinsaturados y 0,13 g de ácidos grasos poliinsaturados. En cuanto a los ácidos grasos específicos, encontramos 3,6 gramos de omega 6 por cada 1.000 calorías y nada de colesterol. Pero, sobre todo, lo que más contiene es agua, con 93,4 g.
Una primera mirada general nos permite ver que la endivia es un alimento de bajo contenido energético. Destacan los hidratos de carbono, especialmente por su contenido en inulina, un oligosacárido reconocido por su acción prebiótica. Además, es una fuente significativa de folatos y vitamina A. Una ración de endibias cubre alrededor del 20% de las ingestas recomendadas de esta vitamina para la población de estudio.
En cuanto a los minerales, el potasio es el más destacado., conteniendo 350 mg por cada 100 g, tanto como el plátano. Además, al consumirse principalmente en forma cruda, como en ensaladas, se evitan las pérdidas de nutrientes que pueden ocurrir durante el cocinado. Pero veamos con más detalles cuáles son los potenciales beneficios de incluir la endibia en nuestra dieta.
Salud ósea
La endivia, rica en vitamina K, desempeña un papel crucial en el proceso de coagulación sanguínea, el metabolismo óseo y el bienestar general. Al aumentar los niveles de proteínas que ayudan a retener el calcio en los huesos, fortalece la estructura ósea y reduce el riesgo de fracturas y osteoporosis. Incorporar 100 g de endibia en las comidas diarias cubre casi el 50% de la ingesta diaria recomendada de vitamina K.
Abundante en antioxidantes
Esta hortaliza actúa como un almacén de antioxidantes, incluyendo la vitamina A y el beta-caroteno, neutralizando eficazmente los radicales libres y protegiendo las células y tejidos del daño inducido por el estrés oxidativo. Además, estudios han destacado la presencia de antioxidantes como la quercetina, el kaempferol y la miricetina en la endibia, reduciendo aún más el riesgo de enfermedades crónicas.
Para la vista
El beta-caroteno es un excelente aliado para mantener una adecuada salud visual y reducir el riesgo de sufrir problemas oculares asociados con la deficiencia de vitamina A. Ayuda a aliviar síntomas como picazón en los ojos, ojos secos y úlceras oculares, e incluso puede prevenir la degeneración macular relacionada con la edad y la ceguera nocturna.
Bienestar cardiovascular
Rica en potasio, fibra dietética y ácido fólico, la endivia promueve la salud del corazón al estabilizar la presión arterial y regular el equilibrio electrolítico. Su contenido de fibra también ayuda a mantener niveles saludables de colesterol al unirse al colesterol en el sistema digestivo y prevenir su absorción.