Además del tironeo que ya se anticipa entre partidos y actores políticos por la asignación de plurinominales, en algunos sectores ha generado confusión y llamado la atención que el PRI vaya a tener posiciones de representación proporcional pese al triunfo en los 16 distritos.
No es tan complicado, habría que remitirse primero al convenio de coalición en donde se estableció el origen partidista de las candidaturas a diputaciones locales, y ahí se definió que cinco fueron del PAN, nueve del PRI y dos del PRD.
Y de acuerdo con el Código Electoral, una vez declaradas válidas las elecciones, termina automáticamente la coalición, y quienes resulten electos quedarán comprendidos en el partido o grupo parlamentario que se haya señalado en el convenio de coalición.
Así que entonces de las nueve pluris, para el PRI serían tres; dos para Morena y el PT; y una para el Verde y UDC.
Y aunque los cómputos distritales y municipales serán a partir de este miércoles, los números que ya se conocen a través del PREP, que por cierto funcionó sin contratiempo alguno, dejan ver varias cosas interesantes.
Si vamos a lo que se muestra a simple vista, sin entrar en detalles de porcentajes de participación en cada distrito, encontramos por ejemplo que cuatro de los cinco candidatos del primer distrito son los que menos votos obtuvieron en un comparativo con los 16 de su partido, incluida la ganadora Claudia Aldrete; y el quinto candidato, aunque perdió, fue el que más votos obtuvo entre todos los de la coalición que lo postuló, el ex priísta Alberto de Luna, quien compitió con las siglas de UDC y Verde.
De Luna obtuvo incluso más votos que el líder de su partido y candidato a gobernador Lenin Pérez, quien en Acuña, que se supone es su bastión, Jiménez y Zaragoza logró 16 mil sufragios, y su candidato a diputado casi 17 mil 800.
Junto con el de Lenin cayó el mito de su sobrina Paloma de los Santos, quien ha roto con todos los partidos a los que se ha acercado y en esta ocasión compitió por Morena, logrando 14 mil votos. Fue la candidata de ese partido con menos sufragios en el estado, pero aún así dice que es el principal activo político en la frontera coahuilense… así como decir, cualquiera puede.
Ya que estamos en los mitos que se derrumbaron, veamos los de algunos candidatos del PT que eran presentados como líderes de gran arraigo, comenzando por Miroslava Sánchez, quien hace no mucho fue diputada federal y dirigente estatal de Morena, y ahora fue la novena candidata petista en número de votos.
No mejor le fue a Alejandro Campos, al que proyectaban como un rival enorme por su supuesta ascendencia en el magisterio, pero quedó a media tabla, el octavo candidato del PT con menos votos, y su compañero de gremio, Francisco Gaytán, quedó en décimo lugar.
En Morena ya mencionamos el desplome de Paloma de los Santos, pero con ella también se diluyeron otros mitos como el de Lizbeth Ogazón, diputada en funciones y que no alcanzó la reelección, pero además quedó en el penúltimo lugar de la tabla del partido guinda, antecedida por José Ángel Pérez Hernández, quien apenas logró 15 mil 900 votos, y pensar que a veces hasta se subía a la silla voladora a soñar con la gubernatura.
De los panistas, llama la atención que su secretario general, Gerardo Aguado, quien ya ha sido diputado, hizo una intensa campaña y mantiene permanente presencia en medios, ganó su distrito pero no fue el candidato más votado de su partido, quedó a media tabla con 40 mil 800 sufragios, mientras que Blanca Lamas, quien iba en el distrito 9, y de quien poco se conocía antes de su postulación, alcanzó 57 mil 800 votos.
De los 16 que contendieron por la Alianza Ciudadana, quien menos votos obtuvo fue Claudia Aldrete en el distrito 1, pero si lo centramos a los de militancia priísta la más baja fue Olivia Martínez Leyva, con 31 mil 388 votos, y la más alta Luz Elena Morales, con más de 58 mil 800.
Aquí sin embargo se puede entrar a un análisis más a detalle, y si nos vamos únicamente a los tres distritos de Saltillo en donde compitieron mujeres, encontraremos que fue en realidad Beatriz Fraustro quien mayor porcentaje de los votos obtuvo, con el 56.8%, seguida de María Barbara Cepeda con el 56.1%, y Luz Elena tuvo el 55.7%.
Esto se explica con la participación, que en el distrito de Luz Elena fue del 59.1% con un padrón de más de 182 mil electores; en el de Beatriz Fraustro fue el 52.7% de 142 mil electores; y en el de María Bárbara 51.2% de 141 mil 800 electores.
Un último dato curioso, en la pugna frontal entre Armando Guadiana Tijerina y Ricardo Mejía Berdeja, cada uno perdió frente al otro su ciudad natal. Así el empresario minero tuvo en Torreón 72 mil 309 votos frente a 27 mil 500 de Mejía; pero en Múzquiz el PT tuvo 6 mil 600 y los guindas 5 mil 100.
Quedan los números para los que les gusta la aritmética electoral, el futurismo y el diseño de escenarios. Pero sobre todo queda la lección para quienes andan en la competencia política: trabajo mata grilla, hay que sembrar con tiempo, cuidar la parcela y luego entonces cosechar.