La UNAM implementó en Ciudad Universitaria una red de geosenderos, a fin de preservar los elementos geológicos o no vivos, es decir, rocas, fósiles, minerales, suelos y relieves, así como la biodiversidad del lugar, y reconocer el valor e importancia de este espacio; se suman al proyecto Geopedregal.
La investigadora del Instituto de Geología (IGL) de la Universidad Nacional y vocera de esta entidad académica en el proyecto Geopedregal, María del Pilar Ortega Larrocea, explicó:
En el plan participan los institutos de Geografía (IGg), el IGL y Geofísica (IGEF), los cuales apoyan en la limpieza y restauración de espacios donde se localiza la piedra volcánica, hogar de una gran biodiversidad.
“La idea inició hace una década con el proyecto Geopedregal, del Instituto de Geología de la UNAM, y de ahí invitamos a participar a los institutos de Geografía y Geofísica, la Coordinación de la Investigación Científica y la Reserva Ecológica. A partir de ahí el espacio se ha restaurado con el apoyo de estudiantes y se realiza un taller llamado Restauración de pedregales remanentes, y muchos proyectos de investigación”, abundó la especialista del departamento de Ciencias Ambientales y del Suelo.
De momento, el sendero está formado por cuatro pedregales que rodean los tres institutos participantes, además del Geopedregal, y se propuso a la Coordinación de Sustentabilidad de la UNAM restaurar el que está enfrente del Centro de Desarrollo Infantil de esta casa de estudios.
Cada uno de los espacios que forma parte del geosendero está abierto permanentemente al público que circula a diario en Ciudad Universitaria, por lo cual se trabaja en su limpieza y en carteles de divulgación para informar sobre sus características.