Los glaciares del campo de hielo de Juneau, en el sureste de Alaska, se están derritiendo a un ritmo más rápido de lo que se pensaba y podrían alcanzar un punto de inflexión irreversible antes de lo esperado, según un estudio publicado este martes.
Investigadores de la Universidad de Newcastle (Inglaterra) descubrieron que la pérdida de glaciares en el campo de hielo, situado justo al norte de Juneau, la capital de Alaska, se ha acelerado rápidamente desde 2010.
El deshielo de los glaciares contribuye en gran medida a la subida del nivel del mar, una amenaza para los asentamientos costeros de todo el mundo. Según los investigadores, el ritmo actual de deshielo podría provocar un declive permanente del campo de hielo de Juneau.
«A medida que continúa el adelgazamiento de los glaciares de la meseta de Juneau y el hielo retrocede hacia niveles más bajos y un aire más cálido, es probable que los procesos de retroalimentación que esto pone en marcha impidan el futuro recrecimiento de los glaciares», dijo en un comunicado Bethan Davies, profesora titular de la Universidad de Newcastle y responsable del estudio.