El Parlamento Europeo reclamó que se consagre el derecho al aborto en la Carta de Derechos Fundamentales de la Unión Europea.
Apenas dos semanas después del fallo del Tribunal Supremo de EE.UU., que anuló una protección federal de este derecho , que llevaba en vigor desde 1973, una coalición de los grupos socialdemócrata, liberal, verde y de la izquierda de la Eurocámara logró una mayoría alternativa (que no requiere a los populares europeos) para sacar adelante esta solicitud. Su objetivo es reformar el artículo 7 de la Carta, que ahora consagra el derecho al respeto de la vida privada y familiar, domicilio y comunicaciones de las mujeres, para añadir el derecho «a un aborto seguro y legal».
«La salud y los derechos sexuales y reproductivos son derechos humanos fundamentales que deben protegerse», recalcan los eurodiputados, que condenaron los recientes retrocesos en los derechos de las mujeres «en Estados Unidos y en algunos Estados miembros» de la UE.
Una reforma que no obliga
Reformar la Carta de Derechos Fundamentales de la Unión Europea, que recoge los derechos civiles, políticos, económicos y sociales de los europeos y se proclamó en el año 2000, requiere la unanimidad de todos los Estados miembros para ser reformada, incluidos aquellos que aún no protegen el derecho al aborto, como Polonia y Malta.