El asunto es el siguiente. La carrera de Shakira no pasaba por su mejor momento, entre problemas de voz y con Hacienda.
Pero como todo es susceptible de empeorar, su marido, el ex futbolista Piqué, se marchó y la dejó por faldas.
Y ahora viene lo bueno: en una de las venganzas más espectaculares de la historia de la música, Shakira se alió con el productor argentino Bizarrap y lanzó esta semana la madre de todas las rajadas pop.
La canción acumula más de 60 millones de reproducciones en YouTube en apenas 24 horas y no se habla de otra cosa.