Los encargados de ecología en Europa publicarán oficialmente un decreto para regular las características de estas áreas y que deberán instalar este mismo año
Las restricciones de tráfico llegarán este año a todas las urbes europeas: decenas de ciudades están preparando ya sus propias zonas de bajas emisiones (ZBE). La Ley de Cambio Climático aprobada en 2021 obliga a las localidades de más de 50.000 habitantes —y a las de más de 20.000 más contaminadas— a crear una de estas áreas antes de que acabe este mismo año.
Las ZBE son áreas —situadas mayoritariamente en el centro de las ciudades— en las que se prohíbe el acceso a los vehículos más contaminantes —los más antiguos— para mejorar la calidad del aire. Para ello, se tiene en cuenta el sistema de calcomanías de la Dirección General de Tráfico local: los coches de gasolina matriculados antes de 2000 y diésel anteriores a 2006 carecen de etiqueta. La etiqueta B le corresponde a coches de gasolina de entre 2000 y 2006 y diésel de 2006 a 2013. La C, de gasolina posteriores a 2006 y de diésel posteriores a 2014. Eco: los híbridos en general. Cero: los eléctricos o los híbridos con una autonomía de más de 40 kilómetros. Hay más de 300 áreas similares en otras tantas ciudades europeas; la última en anunciar la suya ha sido París.