El concepto de que los habitantes de una ciudad deben poder acceder a todos los servicios esenciales en un máximo de 15 minutos, en bicicleta o andando, es muy popular en Europa. ¿Es factible en Latinoamérica?
La crisis sanitaria mundial del coronavirus puso de relieve la importancia de la proximidad. Los confinamientos perimetrales que se decretaron durante la pandemia en numerosas ciudades limitaron los movimientos de los ciudadanos, que redujeron sus desplazamientos al área más cercana de sus viviendas.
En este contexto, el grupo de Liderazgo Climático C40 una coalición de ciudades que se han aliado para reducir las emisiones de carbono y adaptarse al cambio climático, adoptó el concepto de la ‘Ciudad de los 15 minutos’ ideado por el franco colombiano Carlos Moreno, asesor de la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, expresidenta de esta organización internacional.
La idea propone que los ciudadanos encuentren en un radio de un cuarto de hora, ya sea a pie o en bicicleta, todos los servicios que les permitan vivir, trabajar, abastecerse, cuidarse, educarse y descansar, cubriendo así todas sus necesidades esenciales. Este modelo ha ido tomando fuerza en Europa y extendiéndose a otras ciudades del mundo, debido a los beneficios ambientales que comporta, como la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero, principales causantes del aumento global de las temperaturas