El ex futbolista y técnico italiano, actualmente al frente del Real Madrid, se graduó en el Master en Ciencias y Técnicas de la Actividad Motora Preventiva y Adaptada. «Ahora podré decirle a los jugadores que deben llamarme doctor».
IL Dottore Carletto…
Carlo Ancelotti, técnico italiano del Real Madrid, fue investido este miércoles como doctor ‘honoris causa’ por la Universidad de Parma, donde comenzó su carrera como futbolista, con un discurso en el que, muy emocionado, recordó sus inicios y resaltó lo valores del deporte.
Ancelotti recibió el título de Master en Ciencias y Técnicas de la Actividad Motora Preventiva y Adaptada, a propuesta del departamento de Medicina y Cirugía y bromeó asegurando que le gusta que le llamen “Dottore” (doctor), el título que se da a los licenciados italianos en la Universidad, y que les dirá a sus jugadores que le pueden llamar así.
Aseguró que aunque le digan que no ha hecho muchos exámenes, ahora cada tres días tiene que preparar uno “donde eres juzgado”.
Explicó que el talento no lo tienen todos, porque es genético, pero todos pueden practicar deporte porque ayuda y es una escuela de vida”.
«El deporte enseña tantas cosas: a competir contigo mismo y buscar mejorar nuestros limites».
Carlo Ancelotti
Y agregó, explicando su experiencia a grandes niveles, que el futbol “me ha enseñado el respeto por los demás, el respeto de las reglas y el respeto por la autoridad” y “como entrenador a gestionar un grupo, que no es fácil, y a escuchar”.
Aseguró que los futbolistas de hoy “son muchos más profesionales que antes” y que ha tenido la fortuna de “entrenar a hombres con un talento increíble”.
Continuó hablando de “la pasión” por el futbol que le ha servido para “continuar estos 44 años” y que “hay que tenerla porque no se compra en el mercado”.
Y destacó que le ha ayudado su carácter tranquilo para usar “más la persuasión que la percusión” en sus relaciones con los jugadores.
Ancelotti, a quien se les escaparon las lagrimas durante la ceremonia, se volvió a emocionar a mencionar a toda su familia y a sus cinco nietos que le recuerdan: “que soy abuelo y que no soy ese chico que llegó a Parma en 1975”.
Por su parte, el también entrenador Arrigo Sacchi, participó en la ceremonia y elogió a su asistente en el Mundial de Estados Unidos 1994: «Carlo Ancelotti ya era ‘doctor’ en el futbol, ahora lo han autentificado. ¿Cuál es la cualidad? Ser una persona inteligente, con gran humanidad y grandes capacidades».