Estado de México (Edomex) es la joya de la corona en los comicios de este año. La entidad está en manos del PRI desde hace 94 años. En las elecciones presidenciales de 1988, Edomex y el entonces Distrito Federal votaron por el candidato del Frente Democrático Nacional, Cuauhtémoc Cárdenas. La izquierda empezó a gobernar la capital en 1997 —con Cárdenas—. El único jefe de Gobierno que ha sido presidente es Andrés Manuel López Obrador. En el Valle de México se concentra el 20% de la población del país. Si Morena vence en Edomex a la coalición PRI-PAN-PRD, como anticipan las encuestas, tendrá mayores posibilidades de ganar la presidencia de la república en 2024.
La candidata de la 4T a la gubernatura es Delfina Gómez, quien compitió por el cargo hace seis años y estuvo a menos de tres puntos de derrotar al priista Alfredo del Mazo. Esta vez, la exalcaldesa de Texcoco —por Movimiento Ciudadano y el PT— afrontará a la priista Alejandra del Moral, postulada por la coalición Va por México. Gómez aventaja a Del Moral por 21 puntos (Covarrubias y Asociados, 01.03.23). Edomex y Coahuila son los únicos estados donde no ha habido alternancia.
No es la primera vez que Gómez y Del Moral se enfrentarán en las urnas. En 2018 fueron postuladas por Morena y el PRI para el Senado. El triunfo correspondió a la fórmula de Gómez y Marta Guerrero. El escaño de primera minoría lo ganó Juan Zepeda, excandidato del PRD a la gubernatura. Del Moral ocupó después un asiento en el Congreso local y más tarde la Secretaría de Desarrollo Social. El aspirante con mayor intención de voto para las elecciones del 4 de junio era el panista Enrique Vargas, exalcalde de Huixquilucan y actual diputado.
Acción Nacional gobierna cinco estados y el PRI tres. El partido azul y blanco cedió al PRI las nominaciones en Edomex y Coahuila a condición de postular al candidato de la alianza Va por México para las elecciones presidenciales de 2024. El PAN es la segunda fuerza en el Congreso y en la Cámara de Senadores. Además, uno de sus gobernadores, Mauricio Vila (Yucatán), se perfila para la sucesión del año próximo. Los aspirantes de Morena mejor posicionados para la presidencia son Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de CDMX, y Marcelo Ebrard, secretario de Relaciones Exteriores.
El presidente López Obrador mantiene una relación cordial con el gobernador de Edomex, Alfredo del Mazo, e incluso lo ha elogiado. Los «sospechosistas» advierten un arreglo con Morena para entregar el poder a cambio de una salida sin sobresaltos. En Coahuila, las intenciones de voto las lidera la coalición PRI-PAN-PRD, cuyo abanderado es Manolo Jiménez, exdiputado local y exsecretario de Desarrollo Social, lo mismo que Del Moral. El gobernador Miguel Riquelme asegura que en su caso no negociará las elecciones por un cargo en el Gobierno de AMLO.
A diferencia de Delfina Gómez, el candidato de Morena en Coahuila, Armando Guadiana, no ha podido unificar siquiera a su propio partido. El exsubsecretario de Seguridad Pública, Ricardo Mejía, nominado por el Partido del Trabajo, le ha empezado a ganar las preferencias y los reflectores. Frente al letargo del empresario minero, el político de La Laguna intensifica su presencia en las redes sociales y sube el tono de sus denuncias contra el exgobernador Rubén Moreira, a quien acusa de «dictadorzuelo». El mensaje para el «capo de capos», como le llama en uno de sus videos, es que «cuando el tigre ruge, los corruptos tiemblan». ¿Será?