Cuando se trata de manejar el clima invernal extremo, la ciudad de Buffalo, en el oeste de Nueva York, puede estar en una liga propia.Con su estadio de fútbol enterrado bajo la nieve apenas dos días antes de un gran partido de playoffs, los Buffalo Bills de la Liga Nacional de Fútbol hicieron un llamado de ayuda el viernes, después de que partes del área de Buffalo recibieran hasta 5 pies (1,5 metros) de nieve esta semana. La respuesta fue inmediata. En 90 minutos, cientos de fanáticos armados con palas de nieve acudieron al lugar, desafiando temperaturas bajo cero y la posibilidad de aún más tormentas de nieve. El trabajo paga $20 por hora.
Con entre 300 y 400 personas ocupando rápidamente todos los puestos de trabajo, los Bills tuvieron que actualizar su anuncio, diciendo que ya no necesitaban paleadores debido a una «tremenda respuesta de Bills Mafia», el apodo dado a la base de fanáticos.Pero siguieron llegando, dijo Kevin Burns, director de proyectos de Jani-King of Buffalo, el servicio de limpieza comercial que mantiene el estadio Highmark en Orchard Park.»Todavía tenemos 200 o 300 personas en fila», dijo Burns desde el estadio. «Es una locura. Son principalmente fans. Algunas personas también necesitan el dinero».
